Cabañas Masía San Bartolomé
Estamos en plena montaña, en el bonito Paraje de San Bartolomé de Villahermosa del Río, a 1000 metros de altitud, en un estratégico punto de partida de numerosas excursiones y visitas por el Maestrazgo de Castellón y Teruel. Las cabañas Masía San Bartolomé son un lugar realmente atractivo para disfrutar de unos días en pleno contacto con la naturaleza y la familia.
Las instalaciones de Masía San Bartolomé se componen de 6 cabañas de madera más el Centro de Información y Recepción. El hecho de no admitir grupos y contar con un reducido número de cabañas, además de la considerable distancia entre ellas, garantiza la intimidad y el descanso de nuestros clientes, a los que ofrecemos tranquilidad y confort en pleno contacto con la naturaleza.
Nuestras cabañas, completamente equipadas y con capacidad para 4 personas, constan de dos habitaciones dobles (una con cama de matrimonio y otra con dos camas individuales), salón-cocina, cuarto de baño completo y porche. Disponen de calefacción controlada por el cliente, cocina vitrocerámica, horno microondas con grill, nevera, televisión en comedor y habitación de matrimonio, menaje, vajilla, toallas, secador de pelo, ropa de cama... Hay servicio de lavandería para estancia igual o superior a 5 noches.
Disponemos de una estupenda piscina, exclusiva para las personas alojadas. Además, cada cabaña cuenta con un parking individual y gratuito que permite la comodidad de tener el coche en todo momento a nuestro lado. Junto a las Cabañas, en la plaza de la ermita, está la zona de paelleros y barbacoa con mesas, bancos y una fuente de excelente agua. Disponemos de juegos de mesa y una zona de columpios para los más pequeños.
En su entorno más cercano encontramos la plaza de la ermita y la masía de San Bartolomé; la fuente del mismo nombre, el barranco, el sendero de gran recorrido GR-7 y un magnífico paisaje, lo cual hace del Paraje un lugar realmente atractivo para disfrutar de unos días en pleno contacto con la naturaleza. Villahermosa del Río (Alto Mijares - Castelló) es una de las zonas más montañosas de la geografía valenciana. Todo el territorio está delimitado por montes que superan los 1500 metros de altura, destacando el Penyagolosa de 1814 m. Las montañas, junto a los dos ríos principales, los valles y los barrancos, permiten disfrutar de espectaculares parajes ricos en plantas medicinales, bosques de carrascas, pinos o robles. Desde el punto de vista del Patrimonio Natural, Villahermosa es, sin duda, una zona de alto valor ecológico. Muy cerca de las cabañas encontramos las Fuentes de San Bartolomé y del Picayo; desde esta última podemos continuar caminando por el sendero GR-7 hasta llegar al Pino Cacho (antiguo refugio real hacia San Bartolomé, destino de romerías) y disfrutar del espectacular paisaje del macizo del Peñagolosa. Diseminadas por todo el término municipal encontramos numerosas masías, fuentes, ermitas y caminos que nos muestran cómo fue la vida rural en los montes y valles de Villahermosa. Vale la pena conocer el cauce alto y nacimiento del Río Carbo, de preciosas cascadas y paisaje y el cauce del Río Villahermosa y sus diferentes barrancos afluentes (Regajo, Magro...).
Cincuenta y ocho municipios de las provincias de Castellón y Teruel componen la Mancomunidad Turística del Maestrazgo. Son todos municipios del interior de gran belleza y singularidad que fundamentalmente basan su economía en la agricultura y la ganadería. Estos pueblos tienen un gran patrimonio histórico y cultural, manteniendo la belleza de las antiguas construcciones arquitectónicas además de un entorno natural magnífico. Tampoco podemos olvidar la variada y excelente gastronomía y las fiestas singulares que se han mantenido a lo largo de muchas generaciones. Desde nuestras cabañas podrás realizar con tu bicicleta (de montaña o de carretera) un sinfín de rutas inolvidables. Pregúntanos por las rutas, ya que disponemos de la información necesaria (perfiles, distancias, grados de dificultad...) de algunos tracks que hemos grabado.
Con frecuencia, numerosas aves sobrevuelan el cielo de las cabañas. En muchas ocasiones se trata de buitres, ya que a pocos kilómetros existe un Refugio de Rapaces creado en el año 2000 por el Ayuntamiento de Villahermosa con el objetivo de contribuir activamente en la conservación de las aves que todavía habitan en la Península Ibérica. La especie más emblemática es, sin duda, el buitre leonado, una enorme ave que se caracteriza por su gran envergadura alar y por sus hábitos carroñeros. También es posible la observación de otras especies mucho menos frecuentes en nuestro territorio, como son el alimoche, el milano negro y numerosas especies de córvidos. De forma indirecta, el refugio contribuye al aumento de especies de aves insectívoras presentes en los alrededores. Es posible observar, además, otras joyas de la fauna ibérica como el águila real, el águila perdicera, el águila culebrera, el águila calzada, el búho real, el carabo y mamíferos como la cabra montés, el zorro y el jabalí.
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